Regla 1:
Utilizar residuos de distintas procedencias bien mezclados
Mezclar regularmente estos residuos ayudará a que el proceso se transforme mejor en compost.
Al iniciar un compost, el truco está en aportar una base de compost maduro que sirva de levadura.
Regla 2:
Acuérdate de triturar las ramas de tus árboles y arbustos y de romper los tallos de las plantas con tijeras o a mano. Esto facilita el ataque de los organismos al compost, mejora la mezcla de su compost y acelera el proceso de compostaje.
Triturar todos los residuos leñosos antes de incorporarlos al compost
Regla 3:
Airear la pila de compost con regularidad
El primer volteo de su compost debe tener lugar entre 2 y 4 semanas después de la creación de la pila. Esta operación evita que la temperatura descienda y favorece la actividad de las bacterias termófilas y les aporta el oxígeno que necesitan para trabajar. Debe repetirse cada 3 ó 4 semanas.
Por último, la aireación permite obtener una mezcla homogénea que favorece el contacto estrecho entre los diferentes residuos con funciones complementarias en la transformación en compost.
Para favorecer la aireación del compost, el truco consiste en crear una chimenea utilizando un tubo de PVC perforado colocado verticalmente en el centro de la pila.
Regla 4:
Tener el nivel de humedad adecuado
Una pila de compost demasiado seca hará que las bacterias desaparezcan o se vuelvan inactivas en el proceso. Sólo los hongos estarán activos. Esto da lugar a la aparición de filamentos miceliales blancos.
Un compost demasiado húmedo reduce la cantidad de oxígeno y provoca la putrefacción y la emisión de un fuerte olor a amoníaco. Lo ideal es que, al sostener el compost en maduración en la mano, no salga agua, sino que se note la humedad.
Si su compost está demasiado húmedo, añada residuos secos ricos en carbono C.
Regla 5:
Enriquece y mantenga compost
He aquí las diferentes soluciones:
- Activadores biológicos, ricos en nutrientes y microorganismos.
- Enmienda calcárea o magnésica (dolomita) que es un verdadero aporte en oligoelementos y tiene la virtud de neutralizar los posibles malos olores.
- Arcilla que favorece la formación del complejo arcilla-humus para los suelos arenosos.
- Estiércol de ortiga o de consuelda diluido al 10% si sus residuos son ricos en carbono y están secos.
- Cenizas de madera, ricas en fósforo y potasio.
- Nitrógeno orgánico de origen animal (sangre, cuerno tostado o molido) para reiniciar la fermentación y aumentar la temperatura y así matar los parásitos y los hongos fitopatógenos, así como las semillas de malas hierbas.
Regla 6:
Si es necesario, provee una pila de precompostaje
En caso de una gran cantidad de residuos, provee una zona de almacenamiento, trituración y mezcla.
Cubra la parte central de la pila con paja, tierra o una lona porosa. Esto permitirá el paso del aire y el agua. Retire la pila cuando la gire.
Cuanto más grande sea la pila, mejor será el aumento de temperatura y, por tanto, la velocidad de compostaje y la destrucción de los gérmenes de enfermedades.
Regla 7:
Tamizar el compost
No todos los residuos se transformarán completamente durante el primer compostaje. Bastará con tamizarlos y reincorporarlos en la siguiente pila de compost.
Regla 8:
¿Cómo saber cuándo el compost está maduro?
La transformación del compost tarda entre 5 y 12 meses, dependiendo del periodo y de los materiales a compostar. La pila inicial se habrá reducido en unos dos tercios y estará concentrada en nutrientes minerales.
Pistas para saber si su compost está maduro
-El compost se mantiene a temperatura ambiente y, por tanto, ya no sube de temperatura.
-Las pequeñas lombrices rojas son cada vez más numerosas y serán sustituidas por lombrices de tierra una vez que el compost esté completamente maduro.
-Ya no es posible reconocer el origen de los diferentes materiales y residuos iniciales; se han vuelto desmenuzables, de color marrón oscuro, con una consistencia grumosa y un agradable olor a tierra de bosque, a humus.
Regla 9:
¿Cómo se utiliza el compost?
Hay varios usos posibles:
- Mantenimiento de plantas y parterres: esparcir en grandes puñados en la base y luego incorporar superficialmente rascando.
- Plantas en maceta: sustituya el sustrato superficial por su compost.
- Arbustos, árboles frutales, plantas perennes, rosales: distribuir como mantillo.
- Hortalizas: esparcir en grandes puñados al pie y luego incorporar superficialmente rascando o incorporar al suelo antes de plantar.
- Suelos pobres: esparcir el compost a razón de 10 a 20 litros por m² e incorporarlo al suelo.
- Césped: escarificar el suelo y luego esparcir el compost sobre el césped.
Regla 10:
Las herramientas y el equipo adecuados
- Horquilla para voltear y airear
- Uno o dos silos
- Lona con ojales
- Termómetro de capa
- Carretilla
- Trituradora
- Tubo de PVC perforado para servir de chimenea en el centro de la pila
- Regadera
- Recipiente para recoger los residuos de la cocina
- Colador